En algún momento, todas hemos visto una modelo con un vestido y hemos pensado: «tengo que tenerlo!» A veces el impulso de comprar ese vestido es tan grande que ni siquiera nos tomamos un momento para probarlo. Las compras en Internet han hecho de esto de comprar-antes-de-pensar algo aún más común y esto ha dado lugar a algunos serios problemas. En algunos casos, el vestido es exactamente lo que había esperado que fuera y por un momento todo en el universo está perfecto. En otros casos, el artículo no es para nada como lo anuncian y al probarlo mirando en el espejo, el reflejo fantasmal de lo que ves es tan brutal que no tiene más remedio que quemar la compra. Las siguientes 12 mujeres no consiguieron lo que esperaban con estos vestidos que no vestían bien como en las modelos.
1. Cual se supone que es la modelo? No le queda bien a ninguna.
Jajajaja la expresión de su cara lo dice todo!! (CONTINUA EN LA PAGINA 2)