¿Te has preguntado alguna vez qué es lo que simbolizan los confites, o almendras cofitadas, en las bodas y por qué nunca pueden faltar? De hecho, en muchos países es una tradición importante y de cualquier forma en la que hoy en día se organiza una boda, el reparto de confites al final de la fiesta son siempre más grandes, más de moda y más elaboradas donde, además de la almendra dulce tradicional, también se pueden encontrar muchos otros sabores para todos los gustos, desde el café al limón, de la fresa al tiramisù, etc…
¿Cuál es el origen de los confetis en las bodas?
Hay una doble y controversa versión sobre el origen de confetis. Algunos colocan el nacimiento hasta el año 1200 cuando los farmacéuticos árabes prescribían estos deliciosos dulces con fines terapéuticos para promover la fertilidad de las parejas. Otros, sin embargo, según fuentes más históricas, datan el origen a la época romana cuando, para celebrar los nacimientos y matrimonios se preparaban estos dulces hechos con harina, almendras y miel, y en este caso eran los invitados quien los traían para desear un futuro prometedor.
Sin embargo, fue sólo en el siglo de 1400 a 1500 que nació en el confite tal y como los conocemos gracias a la introducción del azúcar utilizado en Europa, precisamente para crear el recubrimiento endurecido. De acuerdo con la tradición actual de las bodas, los confites se insertan en cajas de favores de la boda o archivos adjuntos a ellos en una bolsa que puede ser de tules, de encaje u otra tela, por lo general un tono que recuerda al vestido o al ramo de la novia.
Son para ser regalados a los huéspedes en números impares, cinco para ser exactos, cada uno de los cuales simboliza un deseo para los recién casados: salud, riqueza, felicidad, fertilidad y longevidad. El número de confites es impar porque los números indivisibles quieren desear una vida inseparable para la novia y el novio. Así que ya saben que los confites de las bodas no sirven solo para deleitar nuestro paladar, sino que también suavizan y enriquecen de buenos augurios el futuro de la pareja.