4. Intentar frenar sólo cuando sea necesario.
Este truco no implica la necesidad de comerte una pared o el coche del frente. Es mejor no conducir a una velocidad demasiado alta, considerado que se puede encontrar de repente en el tráfico o en frente de una curva cerrada. Por otra parte, hay que mantener una distancia segura del vehículo que le precede para mantener una velocidad suficientemente constante. Incluso en esta circunstancia, el ahorro en el consumo de combustible es evidente. En el caso de andadura «a hipo», se pueden llegar a perder hasta 25 litros de combustible cada 100 kilómetros. Datos considerables que puede llevar a subir los costes. (continua en la pagina 5)