9) La clara de huevo
Desde el momento en el que es posible congelar huevos enteros, ¿por qué no congelar las claras de huevo? Hay realmente muchas recetas que necesitan de las yemas de los huevos y nos dejan sin saber que hacer con las claras… ¡no dudes entonces en congelarlas! Para hacerlo mezcla las claras y dejad al menos 1,5 cm de espacio entre la mezcla y la tapa del contenedor, porque éstas tienden a aumentar de volumen durante la congelación. Las claras crudas congeladas, una vez fuera del congelador, tienen un sabor agradable, pero se aconseja congelarlas cocidas porque sino se perderían una gran parte de las propiedades organolépticas típicas de este alimento.