2) Cómo limpiar el aluminio satinado
Debido a su porosidad, el aluminio cepillado es más difícil de limpiar y, por lo tanto, es más susceptible a la oxidación. Para hacer una limpieza más profunda, se debe utilizar un poco de jabón aplicado con una esponja abrasiva y, en los puntos donde la suciedad sea particularmente gruesa, con un estropajo metálico. El articulo continua en la pagina siguiente >>