1) Aceite de ricino
El aceite de ricino tiene un poderoso efecto reparador sobre la piel irritada por las fricciones frecuentes. Por lo tanto, para suavizar los callos, después de haber dejado sus pies en remojo en agua caliente y vinagre, simplemente frote un poco de aceite. Para la desaparición definitiva de los callos debe aplicar este tratamiento natural todos los días.