6) Utiliza el blanqueador correcto
Para obtener blancos perfectos es necesario usar un blanqueador ad hoc. En lugar de usar aquellos que se encuentran en el mercado, la mayoría de los cuales no son eco-sostenibles, recomendamos utilizar los conocidos «remedios de la abuela». Por ejemplo, es posible usar una mezcla de soda, bicarbonato y sal para tratar manchas particularmente difíciles previamente al lavado; alternativamente, también es posible usar agua oxigenada de 36 volúmenes, que funciona como un sustituto más que adecuado de la lavandina.