Para mantener la ropa y la ropa interior como nuevas, hay que prestar mucha atención al lavado, especialmente de las prendas delicadas como los sostenes.
Esta prenda la lleva aproximadamente la mitad de la población, y toda mujer tiene al menos un par de estas prendas íntimas y sexis en su cajón de ropa interior.
De encaje, de algodón, con o sin armadura, cada uno tiene el suyo. Hay quienes tienen un número muy considerable de ellos y en cuanto los llevan puestos unas horas los tiran al cesto de la ropa sucia para lavarlos, y quienes, en cambio, solo tienen unos pocos y los lavan con menos frecuencia y más delicadamente.
Pero, ¿cuál es la forma correcta de mantenerlos limpios? ¿Es mejor el lavado a mano o en la lavadora? ¿Podría el centrifugado arruinarlos? Estas son algunas de las preguntas frecuentes que toda mujer se hace, especialmente si la prenda en cuestión es relativamente cara.
Descubramos juntos las 3 soluciones para lavar el sostén de la mejor manera posible.
1) Lavado a mano
La frecuencia con la que se debe lavar un sostén se basa en el número de veces que se ha usado. En cualquier caso, para preservar los tejidos, es bueno no utilizar siempre los mismos y rotarlos. Para los sostenes más delicados, se recomienda lavarlos manualmente. Esto puede hacerse en un lavabo o fregadero con un detergente suave para las prendas delicadas. Después de sumergirlos en agua, hay que moverlos para que el jabón penetre en el tejido. Después de unos 15 minutos, se pueden enjuagar. Para secar el exceso de agua después de escurrirlos suavemente, enróllalos en una toalla.
2) Lavado a máquina
Obviamente, incluso el sostén más caro puede lavarse a máquina empleando únicamente el programa de prendas más delicadas, o incluso en frío, y un detergente adecuado. Para el lavado a máquina, se recomienda colocar los sostenes en una bolsa de malla para la ropa. De este modo, las prendas más delicadas no se revolverán durante el lavado y el centrifugado, que también es suave. Evite también el uso de suavizantes, ya que los tejidos elásticos pueden descolgarse y dejar de ofrecer el apoyo que necesitan sus pechos.
3) Uso de la secadora
Es una gran comodidad secar la ropa en la secadora sin tener que hacer un esfuerzo adicional para tenderla. Pero no todas las prendas son adecuadas para este tipo de tratamiento. El problema del aire caliente es que puede resecar el elástico del sostén, ya que las altas temperaturas funden la fibra sintética de la que está hecho. Esta opción rápida tampoco es recomendable para la armadura, que podrían doblarse y arruinar la forma de la copa. Así que lo único que hay que hacer es tener paciencia y esperar a que se sequen de manera natural.