1) Conceptos básicos
Una vez que hayas comprado o recolectado de tu huerta tus frutas y verduras, tendrás que trabajarlas lo más rápido posible, al fin de que se mantengan absolutamente frescas. Tendrás que lavarlas, secarlas muy bien, quitarles los carozos y las partes que deseas eliminar y, luego, cortarlas en pedazos. A continuación, puedes colocar los pedazos en bolsas plásticas para el congelador o en envases de vidrio, si deseas evitar usar productos plásticos.