4. Limpiar en los pequeños espacios.
Incluso en su segunda vida, las esponjas se pueden utilizar para la limpieza de espacios pequeños o difíciles de alcanzar: basta con recortarla en cuadrados de tamaño pequeño, con un lado de tres o cuatro centímetros, y luego clavarlos sobre una varita. Esto nos permitirá, por ejemplo, limpiar el interior del radiador, o de las lámparas. (CONTINUA EN LA PAGINA 6)