2) El autobronceador
Hay ciertas razones, que sirven para poderlos guardar, como por ejemplo; los filtros autobronceantes, que deben aplicarse antes de la exposición solar, probablemente no los habréis llevado a la playa; si el producto no ha sufrido bruscos cambios de temperatura y se ha mantenido al recaudo de fuentes de luz y de calor, puede volver a usarse al verano siguiente de su compra.