Las plantas de interior son un excelente elemento decorativo para el hogar o incluso la oficina. Embellecen algún rincón anónimo del salón, hacen más armoniosa la cocina y, si tienen flores aromáticas, desprenden su olor natural por toda la casa.
Aunque son muy apreciadas como elemento decorativo en el hogar, siempre hay que recordar que son seres vivos y, como tales, pueden no ser del todo inofensivos para el ser humano.
En particular, hay que tener mucho cuidado si tenemos niños pequeños en casa (en esa franja de edad en la que todo lo que encuentran se lo llevan a la boca) y mascotas que pueden ingerir hojas, flores o incluso simplemente tocarlas.
Sí, porque no todas las plantas son inofensivas, algunas pueden tener componentes que irritan la piel o incluso ser muy tóxicas para el organismo.
Llegados a este punto, veamos juntos de qué plantas debemos protegernos y, por tanto, cuáles NO debemos tener en casa.
1) ¡Cuidado con la dragontea!
Estas dos plantas son muy comunes en el hogar. La primera, también conocida por el nombre científico de dracunculus vulgaris, es muy venenosa y muy popular en España porque su hábitat preferido es el clima mediterráneo. Aunque huele un poco mal, sus colores brillantes podrían atraer a los niños y, por lo tanto, ¡hay que evitarlo en casa!
2) El temido filodendro
El filodendro también es muy común en España: es una planta muy bonita y queda muy bien en casa, gracias a sus grandes y brillantes hojas que pueden llegar a alcanzar un metro de altura. Sin embargo, hay que mantenerse alejado de ella porque los tallos de las hojas desprenden una sustancia blanca y lechosa que puede causar irritación en la piel y los ojos y, si se tiene la mala suerte de tragarla, ¡puede incluso provocar asfixia!
3) Evitar poner hortensias en casa
Que levante la mano quien no haya querido tener en su balcón una hermosa y exuberante hortensia con lindas flores de color púrpura, a veces con un matiz azul. Sin embargo, tras su gran belleza se esconde un cierto peligro, ya que las flores y las hojas contienen hidragenina, una sustancia que, si se ingiere, presenta síntomas similares a los de la ingestión de cianuro. Y esto ya nos dice bastante sobre el hecho de que es mejor evitar tenerlo en casa.
4) Hermosa y… letal: belladona
La belladona siempre se ha utilizado como remedio fitoterapéutico, por sus propiedades antiinflamatorias y sus efectos beneficiosos sobre el sistema nervioso, pero también existen muchas contraindicaciones. Puede ser perjudicial para el organismo incluso si únicamente se toca: la belladona contiene alcaloides en sus frutos y flores, componentes tóxicos que se usaban en la antigüedad para elaborar un suero venenoso.
5) La sorprendente salvia
Sí, la salvia es una hierba muy conocida: se usa en la cocina para aromatizar carnes y pescados, como remedio fitoterapéutico por sus propiedades antiinflamatorias e incluso para uso cosmético, pero al parecer no todo el mundo sabe que la que se utiliza en la cocina es la salvia officinalis, más común, mientras que la peligrosa es la salvia divinorum, que tiene las hojas más grandes y contiene salvinorina, ¡una sustancia peligrosa con efectos tan peligrosos y alucinógenos como los de una droga!
¿Qué plantas son seguras para tener en casa?
Afortunadamente, hay muchas plantas que podemos tener en casa de forma segura, incluso en presencia de niños y mascotas. Entre ellas se encuentra la areca, una planta que también tiene la ventaja de purificar el aire, liberándolo de las peligrosas emisiones de formaldehído que contaminan nuestro aire doméstico.
Otra hermosa planta que crece exuberantemente y que podemos tener en casa es la famosa lengua de suegra, también llamada espada de San Jorge o lengua de vaca (Sansevieria trifasciata): esta también tiene el mérito de purificar el aire porque consigue oxigenar los ambientes, liberándolos del dióxido de carbono. Y luego está el potus, otra planta que es útil para combatir la contaminación interior, es decir, la contaminación en el hogar. Desgraciadamente, tendemos a pensar que el hogar es un lugar seguro, pero dentro de las cuatro paredes de la casa existen peligros para nuestra salud.