5) Favorece el drenaje linfático
Además del sistema circulatorio existe también el linfático. Este sistema tiene la función de no dejar acumular los fluidos en los tejidos, y es un sistema de defensa natural de nuestro organismo. De hecho, a lo largo de los conductos linfáticos existen unos órganos, los linfocitos, que tienen la función de producir los glóbulos blancos, encargados de la eliminación de microorganismos hostiles. Por lo tanto, se aconseja dormir sobre el lado izquierdo, el del corazón, ya que es en este lado en el que se concentra la actividad linfática. Durmiendo en esta posición se favorecerá la eliminación de los fluidos como las grasas y las proteínas en exceso.