4) Harina de amaranto
El amaranto, una planta de origen centroamericano, no contiene gluten, por lo que es un excelente candidato en la dieta libre de gluten: encarecidamente aromática, la harina de amaranto es recomendable para la formulación de galletas, pan etíope, crepes y tortillas mejicanas.
3) Harina de almendras
Especialmente adecuado para la producción de dulces, este tipo de harina tiene un alto valor de calorías. Las semillas de las almendras, enérgicas en su base, molídas son también una fuente de minerales, esenciales para la calcificación de los huesos y para la regularización del corazón, son antisépticos, laxantes y emolientes.