La seducción escrita
Seducir a un desconocido con la magia de las palabras es crear un gran abanico de idealizaciones en el otro. Muchas personas no se sienten seguras al enfrentarse con los demás -sobre todo con alguien que le gusta- cara a cara pero son habilísimos con la palabra escrita. Logran expresarse con gran habilidad y tienen un manejo excepcional del lenguaje. La palabra escrita, despojada de influencias ambientales, visuales y gestuales de un encuentro personal, logra disparar la imaginación del otro que es una de las armas eróticas más potentes.