5) Prevención
La mejor cura es la prevención, también en este caso. Evitar de llenar el coche de olores es una buena manera de asegurarle una frescura. Si eres una persona fumadora, trata de prescindir de los cigarrillos al volante. Y si no puedes, toma la precaución de hacerlo con la ventanilla abierta, usando un cenicero a ser cambiado con mucha frecuencia. Cuando le sucede de comer en el interior del coche, limpie inmediatamente. Migas y otros restos de comida, de una manera imperceptible, contribuyen en gran medida a estropear el aire.