- Vinagre blanco:
Use un nebulizador para rociar sobre las áreas que lo necesitan y dejar actuar durante unos 10 minutos la mezcla obtenida mezclando medio vaso de agua con medio vaso de vinagre. Posteriormente preceder con el lavado.
- Zumo de limón:
Este remedio hecho con limón es muy popular. Mezcle el jugo de limón con agua (la misma cantidad de jugo); entonces, con la ayuda de una esponja o un paño, aplicar sobre las áreas críticas. Dejar actuar durante 10 minutos y poner en la lavadora. (CONTINUA EN LA PAGINA 6).